Fumar. El último tabú moderno. Una mala palabra. Y, sin embargo, para quienes tienen edad suficiente para recordarlo, hay algo visceralmente placentero en el aroma acre de un cigarrillo recién encendido, tal vez porque es aún más atractivo por su notoriedad ilícita, prohibida en lugares públicos.

El olor de Smoke de Akro dependerá de su experiencia fumando. Para los fumadores reformados, olerá nostálgico e inquietante, un recuerdo de abrigos, cabellos y habitaciones impregnadas con el olor acre de cigarillos apagados hace mucho tiempo. Para los no iniciados puede tener un olor casi sorprendentemente intenso, con una variedad de aromas que van desde el caucho y alcanfor hasta una ceniza. Una pizca de dulzura de la tonka cremosa y el benjuí en polvo, el cual en la base sirve de apoyo, pero al final, no hay nada dulce ni gourmand en esto. Sólo una capa transparente e ingrávida de humo de cigarrillo de segunda mano sobre la piel; sexy de una manera sucia y vivida que es difícil de explicar a cualquiera que nunca se haya dado el gusto. 

Smoke se esfuerza en capturar el aroma de una velada en un sofisticado salón de jazz. Si quieres que las personas sientan tu presencia al oler tu fragancia, Smoke es para ti.

Notas: Hojas de Tabaco, Petróleo de Cade, Benjuí, Haba Tonka

Perfumista: Olivier Cresp